Como comenté en la primera entrada sobre las propiedades del aceite de jojoba, su similitud con el sebo lo hace único. Hidrata las pieles secas y seborregula las pieles grasas por feedback negativo: el «sebo» presente (aceite de jojoba) indica a las glándulas sebáceas que hay suficiente, y no deben producir más.
Además de ceramidas, el aceite de jojoba es rico en vitamina E y C que actúan como antioxidantes, protegiendo la piel de los radicales libres. Siguiendo en esta linea, mencionar que los ácidos grasos insaturados y el ácido linoleico que lo forman también ayuda a renovar las capas externas de la piel.
Aunque trataremos esta propiedad en profundidad más adelante, me gustaría introducirla ya. Me refiero a la propiedad calmante, que en el cutis podemos aprovechar para calmar la piel en general, pero quiero hacer hincapié en usarla tras tratamientos exfoliantes, arcillas, depilaciones, afeitado…
Tratamiento para el acné y otras afecciones cutáneas
El aceite de jojoba actúa sobre el acné de dos maneras: previniéndolo y tratándolo.
Su poder seborregulador previene que aparezcan nuevas imperfecciones, ya que al evitar el exceso de sebo los poros no se taponan. Además, la piel queda hidratada y cuidada, así que también nos despediremos de las pielecillas.
Sus propiedades bactericidas, bacteriostáticas y antifúngicas destruye los microorganismos que producen los granos. También limpia los poros (la grasa arrastra la grasa), y su poder calmante reducirá rojeces, picazones, descamaciones, psoriasis….
Crema hidratante para el cuerpo (cicatrices, estrías…)
Si recordamos la entrada sobre los usos capilares, el aceite de jojoba es un poderoso humectante que no se evapora . Las propiedades antisépticas que he mencionado en el tratamiento del acné también ayuda a las pequeñas heridas, como cortes o raspaduras para que estas sanen más rápido y la irritación por la abrasión/lesión disminuya.
En la misma entrada mencionaba que el aceite de jojoba nutre, y mucho. Es por ello que puede ser utilizado en el embarazo para aumentar la elasticidad cutánea y evitar la flacidez y las estrías.
Utilizalo tras la ducha para maximizar la absorción, o también puedes añadir un poco de aceite a la hidratante corporal para conseguir un extra de luminosidad e hidratación.
Hidratar los labios
Debido a que sus efectos hidratantes son duraderos, ayuda a tener los labios suaves y libres de pieles y/o grietas. Además, les otorga un brillo natural. Basta con mojarse un poco el dedo y pasarlo por los labios para aplicarlo.
Desmaquillante
Recordemos que este aceite es sumamente respetuoso con la piel (es no comedogénico, hipoalergénico y no irrita, sino que calma) y con el medioambiente (biodegradable y no tóxico).
Pre y post afeitado
La aplicación del aceite de jojoba antes del afeitado ayuda a suavizar la piel y la barba, por lo que esta última es más fácil de trabajar. Aplicado una vez acabado el afeitado ayuda a calmar y suavizar la piel, y a tratar los pequeños cortecitos. Como he mencionado en el punto anterior, sus propiedades calmantes e hipoalergénicas lo hacen idóneo para los cutis más sensibles.
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